domingo, 18 de enero de 2015

La necesidad de una oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

El 20 de diciembre de 1993, la Asamblea General de la ONU creó la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos con el objetivo de  liderar los esfuerzos de la organización para la protección y promoción de los derechos humanos en el mundo.

El Alto Comisionado tiene su sede principal en Ginebra y tiene presencia en alrededor de 50 países. La Oficina Regional para América Central se encuentra en Panamá, desarrolla acciones en Belice, Costa Rica, El Salvador, Nicaragua, Panamá y República Dominicana, y tiene una oficina de país en Guatemala y un asesor de derechos humanos en Honduras.

Después del golpe de Estado, ha habido un movimiento de la sociedad civil para que la ONU abra una oficina de país en Honduras, lo cual fue solicitado por el propio gobierno hondureño durante el primer Examen Periódico Preliminar.

Si bien una oficina del Alto Comisionado no va a resolver por sí sola los grandes desafíos que enfrentamos en materia de derechos humanos, al menos contribuirá a monitorear la situación en el país y a desarrollar y fortalecer políticas que permitan una lucha frontal contra la impunidad.

La visita oficial del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, los días 14 y 15 de enero en los que sostendrá reuniones con las más altas autoridades del Estado para abordar temas relacionados con los programas que la ONU mantiene en Honduras, es una nueva oportunidad para insistir en la necesidad de la apertura de la oficina de país del Alto Comisionado.

La impunidad en Honduras amerita una oficina permanente pues al final de cuentas, la violación de derechos humanos es un asunto esencialmente internacional pero cuya lucha debe ser liderada por los hondureños y hondureñas que queremos una sociedad justa y en paz.

No hay comentarios: