La
democracia es en gran medida una técnica de convivencia orientada a la solución
no violenta de los conflictos. El diálogo es el ingrediente básico de la
cultura democrática y requiere que las personas puedan dialogar entre sí acerca
de los problemas que las dividen.
La universidad es el espacio natural en el que
las personas deben sentirse seguras para expresarse y escucharse unas a otras a
pesar de las divergencias. El diálogo democrático les brinda a las autoridades
universitarias la oportunidad de informar con claridad sobre las decisiones que
toman y a los estudiantes la posibilidad de ser escuchados cuando se sienten
afectados.
Desafortunadamente,
las amenazas, los requerimientos fiscales contra estudiantes, la detención
arbitraria de universitarios por parte de la policía y las descalificaciones
mutuas han hecho tambalear las posibilidades reales de un diálogo que ponga fin
al conflicto y coloque a la universidad como ejemplo de participación, equidad,
respeto a las diferencias y solidaridad.
No se puede permitir que el conflicto siga causando
estragos en la cohesión social dentro de la universidad. Por ello, es
urgente la creación y mantenimiento de espacios permanentes en los que las
autoridades de la UNAH y los estudiantes puedan interactuar y abordar
conjuntamente los asuntos que preocupan y afectan a la comunidad universitaria.
Y sobre todo, es necesario que tales espacios se
orienten a la reconstrucción de los tejidos rotos dentro de la UNAH, teniendo como
fundamento los derechos humanos, la libre circulación de pensamientos e ideas,
la pluralidad, la democracia y la participación efectiva de todos los sectores
involucrados.
La existencia de un debate abierto, respetuoso y
amplio ha de ser el norte que guíe la conducta de la comunidad universitaria, y
las autoridades de la UNAH tienen que estar conscientes que en una sociedad
democrática, las personalidades públicas deben estar más expuestas –y no menos
expuestas- al escrutinio y la crítica de la ciudadanía, y por tanto, deben
demostrar mayor tolerancia a la crítica.
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